Aunque puede ser que la palabra "cemento" no resulte atractiva por sí sola, ¿qué te transmite al mencionar cemento decorativo? Si estás pensando en esas superficies de color gris tan características de los materiales robustos y cementicios, te daremos una pista: frío, frío...
Robusto sí es y duro, como el que más, pero esa idea de concebir el cemento decorativo como algo frío, monótono y aburrido, es algo que quedó temporadas atrás. Ahora, los materiales industriales son lo más. Y es, además de por las prestaciones que nos han aportado desde sus inicios, por una estética que no nos deja retirar de ellas nuestra mirada.
El cemento decorativo fue un material propio de la arquitectura del New York de los años 50. El mejor aliado para revestir suelos que necesitaban un extra de protección, resistencia y durabilidad, como los pavimentos de comercios y oficinas. Un estilo inconfundible, sobre todo, al ser combinado con paredes de ladrillo y complementos en metal o cuero. La estética industrial por excelencia.
En plena crisis y cuando muchos establecimientos decidieron cerrar, convirtiéndose en coquetos lofts o apartamentos, el cemento decorativo no se retiró y siguió utilizándose hasta lo que conocemos hoy en día, corroborando lo que ya sabíamos: que su resistencia y durabilidad sería comparable solo a con unos pocos materiales.
Hoy en día, gracias a su evolución hacia el mundo contemporáneo, el cemento decorativo ya no es solo un compañero íntimo del estilo industrial, sino que gracias al avance de sus prestaciones y de sus características estéticas, aquellas que permiten personalizar su color, también es capaz de evocar múltiples ambientes diferentes, como el minimalista, nórdico o, combinado con los elementos exactos, también el rústico o bohemio.
Descubre en esta noticia todo lo que has de saber sobre el cemento decorativo y deja que sus virtudes lo conviertan en uno de los protagonistas de tus estancias.
Cemento decorativo: ¿cómo definirlo?
Analizando lo que nos puede transmitir su nombre, podríamos deducir que es un material formado a base de cemento o puramente cementicio, que sirve para decorar las superficies. Y, aunque no sería una mala deducción, lo cierto es que este material tiene más detrás. Mucho más.
El cemento decorativo es un revestimiento que triunfa por sus múltiples ventajas. Su fina aplicación, de como máximo 3 mm, permite una renovación rápida, cómoda o limpia por ser instalado directamente sobre el soporte, siendo compatible con los materiales más populares.
Lejos de que esto sea todo lo que lo hace especial, el cemento decorativo resiste como pocos el tránsito de personas y vehículos, el desgaste ocasionado por el paso del tiempo, el agua corriente y la luz solar, un factor que lo hace el candidato ideal en suelos y paredes de interior y de intemperie y que se ve potenciado por una limpieza y mantenimiento del que muy pocos puede presumir. Un súper material en toda regla, vaya.
Y, por si todo esto ya lo sabías, te diremos más. Sus superficies se pueden personalizar con un amplio abanico de colores diferentes. Así, acabamos con la idea preconcebida (y errónea) de que el cemento decorativo solo es para naves industriales, garajes, establecimientos, comercios u oficinas para incluir una imagen renovada que abarca todas estas superficies y más, siendo paulatinamente un protagonista en las viviendas de particulares.
El hecho de que cada vez más esté presente también en estancias de ámbito personal está muy lejos de ser una casualidad. Porque si el cemento decorativo ha conquistado los hogares de numerosas personas es por actuar de una manera competente y funcional, mientras otorga una estética moderna, vanguardista y exclusiva cuyo carácter es atemporal y combina con cualquier estilo, gusto e intención. Todo lo que realmente importa en lo que a decoración de interiores se refiere.
¿Qué puede aportarte realmente el cemento decorativo? 5 virtudes
Vale que ya te haces una idea de lo que es el cemento decorativo pero, ¿sabes realmente de qué manera puede mejorar tus estancias y, por qué no decirlo, hacerte la vida más fácil? Te contamos las 5 virtudes por las que funciona tan bien.
1. Uno para todos y todos para uno: la polivalencia del cemento decorativo
¿Qué superficie te apetece renovar? Porque independientemente de si es el baño, la cocina, el dormitorio, el salón o tus espacios de exterior, el cemento decorativo combina de cine. Lo mismo pasa con los materiales a revestir: el cemento decorativo es compatible con lo que le pongas.
2. El cemento decorativo optimiza los recursos
A la hora de plantearte una reforma, sabemos que lo primero que piensas en el tiempo y en el coste que te llevará, como es natural. Lo bueno del cemento decorativo es que permite ahorrar recursos al optimizar los tiempos y la mano de obra, cosa que no pasa con otros revestimientos.
Su fácil aplicación sin retirar el soporte, permite crear superficies con armonía y dotadas de un ambiente único y moderno. Sin obras costosas que requieran un gran esfuerzo. El gran paso para llevar a cabo una renovación que antes no hacíamos por pereza.
3. El estilo industrial no es su único aliado: el cemento decorativo es para cualquier ambiente
Elegir el color y los complementos que acompañarán en la decoración con cemento decorativo es fundamental y aquí reside el poder darle la intención que más te guste. Aunque estamos muy (mal)acostumbrados a pensar que es propio del estilo industrial, el cemento decorativo es capaz de evocar cualquier ambiente, por diferente que sea.
Así, su aspecto con tonalidades neutras o claras, puede dar lugar a las atmósferas más minimalistas gracias a su apariencia sin juntas. También a un estilo rústico, eligiendo elementos como las fibras naturales o detalles en madera, rafia o mimbre. Lo bueno de las superficies continuas es que son atemporales y casan con cualquier estilo decorativo, solo hay que elegir el color que más se adapte a él.
Un material completamente customizable y camaleónico, porque aunque siempre se ha pensado que era el gran aliado del estilo industrial, se ha demostrado que puede evocar cualquier tipo de ambiente.
4. Su valor añadido es la resistencia al agua, al tránsito y a las altas temperaturas
Y a todo lo que le pongas, porque no nos vamos a engañar, el cemento decorativo es resistente como él solo. Una resistencia, fuerza y dureza que, además, son duraderas y no pierden intensidad ni se ven afectadas por mucho que pase el tiempo.
5. El cemento decorativo es ideal para ganar amplitud
Entre los múltiples beneficios de los revestimientos continuos como el cemento decorativo, encontramos una de las que más gusta entre los consumidores: la generación automática de una mayor sensación de amplitud.
Las superficies en las que no hay juntas ni líneas de interrupción son fundamentales para hacer que ganemos espacio, aunque sea visualmente. Al percibirse estancias como más amplias, también las vemos como más luminosas, y esto eleva al alza la estética de cualquier espacio. Por ello, es habitual encontrar el cemento decorativo como revestimiento en suelos y paredes de cocinas y baños, estancias que pueden ser más pequeñas que el resto de habitáculos de una vivienda.
Muchos aprovechan esta continuidad para combinarla con tonalidades blancas, beiges o grises y potenciar más si cabe estas dos virtudes. Colores que, además, combinan con cualquier estilo de mobiliario. Los azules pastel, los marrones o los verdes naturales también resultan excelente opción (por si ya estás buscando ideas ;))
Y no nos olvidemos de su limpieza. El hecho de que las superficies no presenten juntas hace la limpieza más fácil y evita la acumulación de suciedad y bacterias.
¿Quieres poner cemento decorativo en tus estancias? Tenemos ideas para inspirarte
Lo puedes aplicar donde quieras, y hasta ahí estamos de acuerdo. Pero conocer dónde y de qué modo es utilizado con mayor frecuencia igual es tu fuente de inspiración para llevarlo a cabo. Estas son las superficies más comunes sobre las que encontrarás cemento decorativo.
1. Cemento decorativo en suelos con un papel importante
Los pavimentos son superficies fundamentales en nuestro día a día. Expuestos al desgaste y a su uso sin cesar, lo que hace que tiendan más a deteriorarse que otro tipo de superficies. Protegerlos es más importante (y fácil) que nunca con cemento decorativo. Suelos extra resistentes al tránsito, al desgaste y, además, con acabados antideslizantes. Una renovación por completo con estilo actualizado, aire nuevo y moderno.
Tip de interiorista: si, además, lo eliges en colores como el blanco, tierra o azul, estarás agregando frescura y aportando un toque armónico y agradable a la decoración.
2. Cemento decorativo en paredes para dejar a un lado la monotonía
Parecen las grandes olvidadas, pero las paredes de cemento decorativo no lo son. A menudo, dejamos de lado la decoración de las superficies verticales por no estar tan expuestas a múltiples factores como los suelos y este olvido, hace que su diseño se vuelva aburrido, monótono o simplón.
A pesar de ello, tarde o temprano pedirán a gritos ser renovadas, y ¿qué mejor con un revestimiento que aportará estilo y asegurará una gran durabilidad? El cemento decorativo y sus ventajas las mantendrán intactas.
3. Cemento decorativo en terrazas: belleza desmesurada
La funcionalidad del cemento decorativo en terrazas es innegable, pero su estética lo es todavía más. Prolonga visualmente las dimensiones, aportando una sensación de continuidad en su conjunto.
Cuál es la tendencia invernal y cómo conseguirla con cemento decorativo
Aunque siempre se ha perseguido esta intención, esta temporada más que nunca destaca por querer una tranquilidad y confort especial. Armonía, equilibrio y paz ¡qué bonitas palabras! Y qué fácil es conseguirlo con cemento decorativo.
Colores que generan armonía
Los colores neutros y crema, además de ser atemporales, combinan con cualquier estilo decorativo y son armónicos por reflejar luz, calma y equilibrio. Se sigue una tendencia naturista que busca, además, la utilización de texturas y formas que nos recuerden a la naturaleza.
Y si hay algo que funciona en el cemento decorativo es precisamente el don que tiene para adaptarse a todo tipo de situaciones y aportar una gran variedad de colores que, combinados entre sí, puedes dar lugar a combinaciones de lo más interesantes.
Minimalismo cálido: fácil con cemento decorativo
Aunque el minimalismo llegó hace tiempo, parece que va a quedarse por mucho tiempo más. La tendencia actual de minimalismo cálido persigue las estancias que son sencillas y que cuentan con los mínimos detalles y elementos pero, a su vez, son capaces de crear un ambiente acogedor.
Las líneas finas y rectas de acabados perfectos del cemento decorativo permiten alcanzar esta idea y plasmarla a la perfección, creando espacios que son diáfanos pero que, a su vez, son realmente originales.
Multifuncionalidad: aquí y ahora
Hace tiempo que la cocina dejó de ser solo para cocinar y el salón solo para ver la TV. Hoy en día, lo más perseguido y lo último en decoración de interiores son los espacios que, siendo múltiples, se convierten en uno solo.
Es habitual encontrar cocinas abiertas al salón o directamente donde una estancia y otra se fusionan. De este modo, se comparten mucho más que elaboraciones culinarias y tiempo de ocio, pudiendo ser espacios multifuncionales donde llevar a cabo varias y diversas cosas a la vez. Así, se crean espacios más amplios, luminosos y abiertos, conectados entre sí.
Una función que cumple a rajatabla el cemento decorativo, al tratarse de un revestimiento continuo gracias al cual se aprovecha el 100% del espacio de una estancia, sin reducir sus dimensiones, y creando continuidad, sacando así lo mejor de cada uno de los espacios.
Microcemento: el cemento decorativo para creaciones de vanguardia
Si ya conoces el microcemento, probablemente los párrafos anteriores te sonarán bastante, ¿verdad? Lo cierto es que el microcemento es el cemento decorativo de vanguardia.
Uno de los materiales más exitosos, innovadores y revolucionarios del mercado, elaborado en base a las últimas tecnologías y a las técnicas más avanzadas. Ese es el microcemento.
Con el microcemento listo al uso de Smartcret® esta afirmación toma más sentido que nunca al hablar de un concepto más revolucionario si cabe: el de poder realizar una renovación de tus estancias tú mismo. Procesos que, si con el cemento decorativo ya eran mucho más fáciles, cómodos y rápidos en comparación con otros revestimientos tradicionales, ahora lo son mucho más. Porque los tiempos los eliges tú, los plazos, el ritmo y el aspecto, también.